En el proceso electoral ordinario 2017-2018 hubo dos claros ganadores: Morena y el PT, quien creció exponencialmente en comparativa con 2015, en donde consiguió un registro de gabinete en las extraordinarias, que lo trajo de ultratumba. Hoy, será la tercera fuerza política en el país en la Cámara de Diputados.
Por Juan Pablo Aguirre Quezada
“Creo que en mi campaña lo interesante fue el valor simbólico –quizás no explícito– de ver a una mujer hablar sobre todos los temas trascendentes de este país; eso fue lo que tuvo un efecto importante en muchas jóvenes adolescentes que se me acercaban, y se me acercan, porque el mensaje era muy sencillo: ‘tú puedes aspirar a dirigir este país”.[1] Cecilia Soto
El Partido del Trabajo (PT) logró máximos históricos en el número de legisladores de su bancada en el Senado de la República y la Cámara de Diputados como resultado de los comicios del pasado 1 de julio. Con ello, en breve se convertirá en la tercera fuerza de San Lázaro, al contar con un aproximado de 67 escaños, con representantes experimentados como Mario Delgado, Oscar González Yañez, entre otros.
En tanto, en la Cámara Alta este instituto político se mantendrá como grupo parlamentario al sumar seis curules, además de la posibilidad de continuar con su alianza con el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), lo que pueden amalgamar una fuerza decisiva en las votaciones y debates de la LXIV Legislatura.
Si bien el PT tiene 28 años de participación política, sus resultados no habían sido tan destacados por lo que existe una expectativa de lo que puede lograr con un mayor capital político. Pese a estar cerca de perder el registro en tres ocasiones: 1991, 2003 y 2015, es decir, en elecciones intermedias. No obstante, logros a nivel local y la política de alianzas con diferentes partidos le han permitido fortalecerse y lograr resultados inimaginables. El reto será mantener el número de legisladores y consolidarse como fuerza importante en el sistema de partidos en México.
Pese a estos logros el PT no tendrá por si sólo una gubernatura, por lo que únicamente tendrá acceso a estos cargos mediante la política de alianzas con otras fuerzas políticas; por lo que consolidarse como alternativa de gobierno a escala estatal será uno de los desafíos a enfrentar.
A lo largo de su historia este partido político se ha caracterizado por ideas novedosas que van desde su nomenclatura a favor de una demanda social importante (el Trabajo), la postulación de una candidata presidencial en 1994 o acompañar a destacados personajes de la izquierda mexicana para renovar el Ejecutivo Federal, como el caso de Cuahutémoc Cárdenas en 2000 o Andrés Manuel López Obrador en 2006, 2012 y 2018.
Sin embargo, esto ha sacrificado un poco la identidad y mística del PT, ya que únicamente han participado por su cuenta en lo que va del siglo XX en las elecciones de 2003, 2009 y parcialmente 2015; por lo que deberá demostrar que su representación en el Congreso es proporcional a su fuerza electoral, a fin de continuar siendo una propuesta vigente para el electorado.
[1] Anayeli García Martínez. “La lucha de las mujeres, vital para la democracia”: Cecilia Soto (entrevista). CIMAC Noticias. 6 de noviembre de 2013. Disponible en: https://cimacnoticias.com.mx/node/64831 (fecha de consulta: 8 de agosto de 2018).