¡Extra, Extra! En el Paseo de la Reforma de la Ciudad México se percibe un olor a Londres. Los Camiones de dos pisos llegan por invitación de Miguel Ángel Mancera y de la mano de la empresa Alexander Dennis, para integrarse a la flotilla de camiones del Metrobús.
Por Livia Liney QS
Involucrados
La Administración de Miguel Ángel Mancera, está en su fase final, y pareciera que uno de sus proyectos para cerrar con broche de oro para él y sus agremiados, es la Línea 7 del Metrobús, misma que correrá de Indios Verdes a Santa Fe sobre Av. Paseo de la Reforma. Sin embargo, el descontento está presente, por una parte el Instituto Nacional de Arqueología e Historia (INAH), el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y la Coordinación Nacional de Monumentos, aseveran la no existencia de estudios previos para salvaguardar los monumentos históricos así como las aéreas verdes.
En el aspecto político el diputado Paulo Cesar Martínez López, del partido Morena, solicitó al Gobierno de la CDMX la suspensión de la Línea; al ser esta perjudicial para el medioambiente. Del Partido Acción Nacional, Mariana Gómez del Campo se pronunció en contra de la Línea, en el mismo sentido.
A su vez la Academia Mexicana de Derecho Ambiental (AMDA), lleva como lema “defender árbol por árbol y calle por calle”, para lo cual interpuso una demanda en el mes de mayo. Dicha demanda procedió, el juez octavo del distrito en materia administrativa, ordenó la suspensión de la construcción de la línea 7.
Por otra parte, los ciudadanos manifiestan su sentir con la obra. Enfrentar el caos vial, calles polvosas, contaminación auditiva, es indudable algo que no quieren vivir. Además una vez más no fueron consultados, tal vez por el temor de obtener un No a la Línea 7 como en su momento pasó con el Corredor Cultural Chapultepec.
Otro sector son las rutas afectadas, se esperaría que pronto tomaran las calles, realizando paros en busca de la defensa de sus derechos laborales, y en contra del abuso de poder el gobierno capitalino.
Qué se busca con la Línea 7
El tema de movilidad se ha vuelto una tendencia en las redes sociales, foros, en las pláticas de café y por supuesto se ha insertado como política pública en la agenda capitalina.
La implementación de la Línea 7 permitirá la sustitución de 180 unidades de transporte considerados como contaminantes, visualmente Reforma tomará una imagen de mayor calidad, reducir el tiempo de traslado de los usuarios un 40 %.
La línea 7 se sumará con 15 kilómetros al Sistema del Metrobús existente. Actualmente integrado por tres tipos de camiones: Articulado integrado por dos o más secciones tipo módulos, llamados también de gusano, por lo general con capacidad para 165 pasajeros; Biarticulado tiene mayor capacidad que un Articulado Convencional cuenta con una extensión de más y de Piso Bajo.
Las características de los nuevos camiones son: ser de dos pisos, tipo Londres, con 12 metros de largo y capacidad para 130 pasajeros, aire acondicionado, pantallas, además de un motor de tecnóloga Euro 6. Dicha tecnología normativa Euro6, aplicada en Europa, tiene como objetivo principal reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NO) y las partículas en suspensión (PM). La empresa Alexander Dennis es el proveedor de dichos camiones, cuyo costo aproximado por unidad será de 11 millones de pesos.
Qué debería buscarse con la Línea 7
La Línea 7 como política de transporte debería buscar una mejor calidad de vida y competitividad, un manejo eficiente de la economía, prever los riesgos políticos, riesgos ambientales, incrementos tarifarios, la implementación de manera eficaz de fuentes de financiación externas.
En palabras simples, generar aceptación ciudadana y a su vez un impacto en la gobernanza de Mancera. Entregando el estudio de viabilidad y rentabilidad del proyecto.
Qué olvidan con la Línea 7
Los criterios generales de una política de movilidad son que se garantice la equidad en el acceso, en este caso podrá acceder la persona que tenga 10 pesos en el bolsillo, lo cual será un candado partiendo del salario mínimo. El ejemplo claro es el SVBUS, servicio exprés, que corre en los segundos pisos de periférico, no todos los ciudadanos lo han tomado como una opción de transporte.
Un segundo aspecto es la eficiencia en la disponibilidad, y sí la capacidad de los camiones se respetará, si la respuesta es afirmativa, no será suficiente para movilizar a los capitalinos en su totalidad. Además, respeto al cupo, será incomodo solicitar la parada desde un segundo piso, esquivar personas, bajar escaleras para llegar a la salida, la integridad del pasajero podría correr riesgo.
Infraestructura de calidad como tercer criterio, pareciera que es primer punto para el gobierno, calidad es traer camiones bonitos de Londres y además comprar a una empresa extranjera específica, y las licitaciones vuelven a quedar en la caja de Pandora. Calidad debería ser entendida como esas adecuaciones que los usuarios aceptan como beneficio.
Finalmente, operatividad, si bien dirían algunos autores que se verá esta fase hasta su implementación, la realidad histórica del Metrobús ha consistido en renovar o detonar nuevos espacios de horas picos, demoras en traslados, contaminación visual y auditiva e insatisfacciones.
Queda en el tintero
La línea 7, es un claro ejemplo del aislamiento que tiene el Gobierno respecto a las políticas de transporte con respecto al planteamiento general. Al final los camiones de prueba llegaron al país, desechar la iniciativa, sería una evidencia de las decisiones de Mancera, buena o mala. Depende desde el balcón que se observe.
El Gobierno de la CDMX acatará la suspensión de la obra, la respuesta es sí, la siguiente pregunta ¿Por cuánto tiempo? Mancera se pronuncio y dijo: la Línea 7 continuará pese a lo señalado por el juez, para él es claro que hay intereses políticos sin embargo dijo que demostrará las bondades de la obra. “Defenderá el Metrobus como un perro” solo le falta decir a Mancera como en 1982 López Portillo defendería el peso.
Las manifestaciones en contra de la Línea 7, es señal de descontento, por una parte los ciudadanos requerimos mejoras en el transporte. No obstante, me pongo a pensar en Reforma y digo: ¡es una linda avenida!, visualmente es de lo mejor de la CDMX. Unos camiones de dos pisos, por supuesto rojos al estilo Londres, no responden a las demandas ciudadanas; solo permitirán llenar las redes sociales de fotos además de apoyar la mercadotecnia, sí eso, postales del México vanguardista.
Y si Mancera se apura seremos el primer país de Latinoamérica con camiones de dos pisos en transporte urbano, bueno, si no nos gana Chile; así que, acelérele Mancera, que nos ganan la primicia.
@idemqs
Fuentes:
Hacia una estrategia nacional integral de movilidad urbana, ITDP.
Asamblea Legislativa del Distrito Federal
Seguimiento cuentas de Twitter @MetrobusCDMX, @ManceraMiguelMX