Por Fernando Carrillo
Muy pocas cosas causan en nosotros gran expectativa y temor, como es el presentar un examen. Aunque la excepción a esta regla pudieran ser los políticos, ya que a ellos parece no importales ser evaluados. Finalmente, enfocan la situación desde su óptica: diseñan el examen, proponen las respuestas y se califican a sí mismos sin ningún pudor. Seguir leyendo